domingo, 18 de enero de 2009

El Neoliberalismo en América Latina

En América Latina el neoliberalismo no tiene un sustento teórico propio, sino es sólo la repetición, en general, de los principios de la doctrina desarrollada por los pensadores alemanes y anglosajones y su aplicación a través de las políticas de ajuste estructural de inspiración monetarista-friedmaniana como alternativa a las corrientes estructural-desarrollistas y dependentistas.

En la región, los experimentos monetaristas se inician en la década del 50, pero, como señala Foxley, "los programas que se aplican en los años setenta ponen mucho más el acento en transformaciones estructurales y en cambios de carácter institucional".

En las postrimerías de la década del cincuenta se implementaron o comenzaron a aplicarse numerosos programas de corte monetarista: Chile, 1956-1958; Argentina, 1959-62; Bolivia, 1956; Perú, 1959, y Uruguay, 1959-62; sin embargo, la aplicación definitiva y abierta de los principios neoliberales es la realizada en Chile, luego del golpe de Pinochet en 1973, constituyéndose en la versión más extrema de lo que se ha dado en llamar "el experimento de la escuela de Chicago".

En la década de los 70 el desarrollo del capitalismo da cabida, entre otras razones, al resquebrajamiento de la teoría de la dependencia y a la apertura de nuevas vertientes del pensamiento económico. Estas nuevas vertientes son el neoliberalismo y el reformismo socialdemócrata.

En los años 80 se consolidan las políticas neoliberales de ajuste estructural; sin embargo, al finalizar la década, se matizan con el diseño de ciertos programas de compensación social para paliar los efectos de la exclusión, particularmente con los Fondos de Desarrollo Social.

Hay autores (James Petras y José Valenzuela Feijoo, entre otros) que advierten sobre la declinación del neoliberalismo. Petras considera que el ciclo político neoliberal consta de cuatro fases:
1) la realización traumática, 2) la redistribución traumática, 3) la consolidación política e ideológica y 4) el declive de la política neoliberal con la emergencia de alternativas.

Sin embargo, el fin del neoliberalismo en América Latina todavía está relativamente lejano, en tanto es un proyecto a largo plazo impuesto por la derecha internacional y apoyada por las burguesías nativas. Fuerzas importantes y poderosas defenderán a sangre y fuego su proyecto y emplearán todos los medios para conseguir su consolidación definitiva, o cuando menos su permanencia a largo plazo. Muestra inobjetable de ello son las políticas económicas aplicadas en el Perú y Colombia. ¿Alguien puede dudarlo?

1 comentario:

  1. De acuerdo maestro Gustavo.

    Debemos seguir urgando en las fuerzas sociales y alianzas para dar un respuesta en los diversos terrenos de interacción que nos toque participar, pues la cultura de lo "no humano" lo "pragmático" son antifilosofías que matan sistematicamente sueños de vernos en una América libre, como alguna vez se pensó en los accionares separatistas del yugo español, sigamos con esperanza vallejiana por ese sendero.

    Un saludo sincero, siga alumbrando el camino reflexivo que se nubla constantemente hoy en día...

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