domingo, 27 de junio de 2010

EL MUNDO ES ANCHO Y AJENO

“Obra de amor es la creación del artista”, dice José Enrique Rodó. Obra de amor es “El mundo es ancho y ajeno” de Ciro Alegría. La protesta surge después: avasalladora, emocionada, trágica, sangrante. No es primero el grito, la intencionada y punzante denuncia; sino la brava y humana emoción fraternal, la agobiante carga de amor, que deja en las retinas del alma todo el retazo de mundo que amó el artista: sus campos, sus cerros, el sol, la luna, el mediodía, la madrugada y, sobre todo, los hombres que destilan su esperanza como siembra alrededor del fuego, de la chacra, del cielo alto y estrellado.

Desde aquí se hace universal su amor, su canto, su protesta. No se comprende de otra manera las lentas y – a veces – cansadas descripciones que nos dicen del amoroso empeño de Ciro en pintarnos toda la belleza bravía y tierna, violenta y tenue de los campos indígenas, de las vivencias comuneras y de su telúrico, humanizado amor: fuerte como el Rumi, rojo como el fuego, alto como el vuelo del cóndor.

Obra de amor es “El mundo es ancho y ajeno” de Ciro Alegría. El amor transforma el mundo. Obra de amor tiene que ser la revolución de los huérfanos, de los pobres, de los últimos…

La Industria 26-03-67

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores